Las principales razones de la cancelación de un proyecto científico de US$10 millones apuntan a ciertos hallazgos arqueológicos y a consecutivas tramitaciones por parte del Consejo de Monumentos Nacionales que habrían hecho insostenible la iniciativa.
El proyecto para instalar el Centro Interdisciplinario de Neurociencia en Valparaíso (CINV) ya es historia. Algo factible en cualquier obra es hallar vestigios arqueológicos que deben ser procesados, calificados y gestionados. En el caso del CINV -que ya llevaba 10 años de desarrollo- el hecho de haber descubierto material arqueológico en el Barrio La Matriz se transformó en la pesadilla que terminó por sepultar la iniciativa.
Para comprender lo que sucedió, en conversación con Emol el ex-director del Centro Interdisciplinario, Ramón Latorre, sostuvo que si el proyecto se detuvo, esto sucedió «exclusivamente por el asunto de la exploración arqueológica». Los dardos de Latorre apuntan al Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), el cual, sencillamente, paró las obras, haciendo imposible retomarlas después.
Según el diario El Mercurio de Valparaíso, los contratiempos implicaron que los costos subieran al doble, de $10.000 millones a $20.000 millones.
El CMN emitió una declaración exponiendo que las obras “se iniciaron sin considerar la relevancia del subsuelo de su emplazamiento, es decir, sin sondeos arqueológicos previos ni un plan de resguardo diseñado con antelación”. Además, calificaron al lugar como “multi-componente, con ocupaciones de los períodos prehispánico tardío, colonial, republicano e histórico reciente”.
“Problema eterno el Consejo de Monumentos Nacionales”
Varios parlamentarios manifestaron su preocupación frente a este caso. Tomás de Rementería, diputado independiente cercano al Partido Socialista, dijo: “Creo que este es un problema de nunca acabar, esta situación es un edificio que podría cambiar la cara de un barrio patrimonial que está muy debilitado en Valparaíso, el Barrio Puerto, todo el sector de la base del Cerro Cordillera. Y acá, por un tema de permisología, de problemas con vestigios arqueológicos, con el problema eterno que tenemos con el Consejo de Monumentos Nacionales, me parece que ya esto es un ejemplo de cómo funciona esto”.
“Yo creo que necesitamos avanzar hacia un sistema que sea más rápido y que se pueda declarar edificios de asunto estratégico, como este, para que puedan ser desarrollados de otra forma. Esto es parte del Sitio de Patrimonio Mundial de la Unesco. Es un edificio de alto interés, no solo científico sino que también patrimonial, entonces me parece que acá esto ya está llegando a una especie de comedia del absurdo, por este tema de los permisos”, añadió el diputado.
A su vez la diputada de Renovación Nacional, Camila Flores planteó: “¿Cómo no es posible que se hayan prevenido estas situaciones con anticipación y que, a medida que han ido ocurriendo, finalmente se haya tomado una decisión de buscar un lugar distinto para hacer este Centro de Neurociencia? Me parece que era fundamental haber tomado esa decisión técnica, administrativa y política de cambiar el lugar”.
Además, la diputada del distrito que incluye a Valparaíso cree que “es fundamental poder avanzar en el desarrollo de este proyecto, cuyo financiamiento original estaba para eso y, por lo tanto, no puede ser la decisión simplemente de no hacerse y botar la plata y hacer como que nada pasó. Aquí hay recursos públicos que se dispusieron para esto, que se utilizaron finalmente, y que se tuvo que paralizar producto de estos hallazgos”, explicó la parlamentaria.
Cabe señalar que en la actualidad se están tramitando en el Congreso diversas reformas para agilizar los trámites para la aprobación de proyectos.