En una declaración conjunta, los países vecinos hicieron un llamado a evitar «actos de violencia y represión», así como también mostraron su oposición a cualquier sanción unilateral que se busque aplicar en contra de Venezuela.
Este sábado los ministerios de Relaciones Exteriores de Brasil y de Colombia emitieron una declaración conjunta para abordar la crisis que vive Venezuela tras las cuestionadas elecciones de julio pasado, donde Nicolás Maduro fue ratificado en un proceso que mantiene escéptica a la gran mayoría de la comunidad internacional.
En el escrito señalan que los dos mandatarios, Luiz Inácio Lula da Silva y Gustavo Petro, sostuvieron conversaciones telefónicas para abordar la crisis que vive el país caribeño, vecino ineludible para ambas naciones.
“Ambos presidentes siguen convencidos de que la credibilidad del proceso electoral solo podrá restablecerse mediante la publicación transparente de datos desglosados y verificables”, plantean en la declaración. “La normalización política de Venezuela requiere el reconocimiento de que no existe una alternativa duradera al diálogo pacífico y a la convivencia democrática en la diversidad”.
En esa línea expresaron su llamado a los involucrados a “evitar recurrir a actos de violencia y represión”.
Sin embargo, a diferencia de países como Chile o Uruguay, donde sus presidentes han expresado directamente que con la decisión del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela se “confirma” que hubo fraude electoral, sus pares del norte fueron más ambiguos.
“Brasil y Colombia toman nota de la decisión del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela sobre el proceso electoral. Reiteran que siguen aguardando la difusión, por parte del Consejo Nacional Electoral, de las actas desglosadas por mesa de votación”, afirman.
Finalmente expresaron su oposición a cualquier sanción unilateral que se aplique contra Venezuela.
Comunicado conjunto Brasil/Colombia. pic.twitter.com/TWwmGEN7dr
— Gustavo Petro (@petrogustavo) August 24, 2024
Fuemte: CNN Chile