Director ejecutivo de Aprimin solicita profundizar las reformas para enfrentar la permisología

Aunque valora los avances legislativos, Sergio Hernández plantea que aún se requiere “mayor agilidad burocrática y reglas simples y uniformes entre los distintos organismos regulatorios”.

Sergio Hernández, director ejecutivo de la Asociación de Proveedores Industriales de la Minería, Aprimin, está optimista frente las perspectivas mineras para este año: “Tenemos una visión principalmente positiva. El precio del cobre continúa en buenos niveles, después de un periodo corto de bajas. Se prevé un aumento de la producción de este mineral de un 5% respecto de las cifras de 2024”.

Y como ejemplos del buen momento de la industria, cita el reciente acuerdo entre Codelco/Andina y Anglo American/ Los Bronces, “que geológicamente son un mismo yacimiento, y aporta al optimismo, así como la buena marcha de QB2, las inversiones de AMSA, Lundin, Collahuasi, filiales de BHP, Vizcachitas, entre otras”.

Como contraparte a las noticias optimistas, el director de Aprimin califica como “muy preocupante y sorpresivo el anuncio sobre el Decreto Supremo en la comuna de Sierra Gorda como zona saturada, que ha sido rechazado por la inmensa mayoría de la comunidad respectiva y con preocupaciones de la autoridad comunal”.

Añade Hernández que “la promulgación de la ley del royalty da certeza, da mayor estabilidad. El mundo ve a Chile mejor de lo que internamente lo ve cierta parte de la población e incluso desde el sector; lo que es por una parte una buena señal, porque nos impulsa a resolver las dificultades en distintas instancias: políticas, productivas, regulatorias, en fin, en todos sus ámbitos”.

Inversiones y permisología

La Comisión Chilena del Cobre publicó el informe “Inversión en la Minería Chilena: Cartera de proyectos 2024 -2033” por US$83.181 millones, la cifra más alta en la última década. Al respecto, el director de Aprimin plantea que “el cambio de metodología aplicado por Cochilco en esta oportunidad dificulta realizar una proyección precisa sobre cuánto de esta inversión se concretará. Factores como los avances en permisos, incorporación de nuevas tecnologías, precios y costos serán determinantes. Históricamente, se estima que entre un 55% y 60% de las carteras de proyectos mineros que genera todos los años Cochilco se materializan, lo que representa una suma de inversión considerable y una señal alentadora para el sector”.

Asimismo, ahora que se ha cumplido un año desde que el Gobierno presentó su paquete de reformas a la llamada permisología, señala que su evaluación es “positiva, se ven esfuerzos públicos y aportes privados, pero seguimos convencidos de que necesitamos una mayor profundidad en acortar tiempos, mayor agilidad burocrática y reglas simples y uniformes entre los distintos organismos regulatorios”.

Y para concretar las inversiones, Sergio Hernández reitera que “una de nuestras principales preocupaciones la constituyen los proyectos de ley que permitirían la reducción de tiempos de permisos y sus tramitaciones, a veces repetitivas en el mismo y distintos organismos que intervienen en estos procesos para proyectos mineros y productivos en general; cierto es que se está haciendo un esfuerzo legislativo, pero esto debe continuar permanentemente, porque los avances que se pueden lograr, en lo que actualmente se discute, claramente no son suficientes para devolverle a Chile el nivel competitivo en minería que se ganó merecidamente desde hace ya más de 30 años”.

“No seamos nosotros, en Chile, quienes desaprovechemos las enormes oportunidades que nos dan los mercados por la falta de minerales críticos frente al calentamiento global. Es la minería la salvación del planeta y en eso Aprimin ha sido y continuará siendo una voz fuerte. Por lo tanto, es una paradoja incomprensible, que los entorpecimientos ambientales sean los que mayormente traban el desarrollo de los productos minerales esenciales para un mundo ambientalmente mejor”, concluye el director ejecutivo de Aprimin.