Las declaraciones del dueño del bar Santo Remedio sobre la crítica situación en la que se encuentra el local -luego de que le revocaran la patente de alcohol del bar y posteriormente rechazara el recurso de reposición-, generó molestias transversales entre concejales de la comuna.
Kabir Engel, dueño del bar Santo Remedio, acusó en entrevista con The Clinic que habría un boicot en su contra de su negocio por parte de ediles, y que incluso habría una persecución contra él.
Representantes de todos los sectores políticos que integran el concejo rechazaron tajantemente los dichos. De acuerdo con diferentes versiones, el motivo principal del cierre fue por molestia de los vecinos, y porque el local operaba de manera ilegal, conforme con las patentes que tenían.
Rodrigo Valenzuela, concejal republicano, afirma que “el bar Santo Remedio, el concejo anterior decidió quitarle la patente de venta de alcohol, por el comportamiento del dueño del local, y por el historial de multas. (…) Ellos ya habían perdido la patente de expendio de alcohol, y uno de los puntos centrales fue por el mal uso de la patente que ellos hicieron“.
Fue la administración actual la que rechazó el recurso de reposición presentando por el bar. Y la decisión, unánime, respondió precisamente a los antecedentes que manejaban.
“Nosotros votamos en virtud de los hechos y los argumentos. Y la evidencia que nosotros tenemos, es que el Santo Remedio estaba funcionando de manera ilegal con respecto a la patente que tienen“, recalca el concejal RN, Mauricio Labbé.
Los cuestionamientos de concejales de Providencia a las declaraciones del dueño del Santo Remedio
Respecto a los declaraciones de supuesta persecución contra Engel, concejales afirmaron que sostuvieron reuniones con él para conocer su versión. El dueño del Santo Remedio también señaló que había una intención de “apagar la comuna”. Sobre esto, los ediles afirman que el caso de este bar es único.
La concejal del Frente Amplio, María Eugenia Pino, afirma que “todos los sectores políticos del concejo están con una disposición a colaborar en esto y buscar soluciones para los vecinos. Pero no hay una persecución ni a este locatario en particular ni al rubro de los restaurantes con patentes alcohólicos“.
En esa línea, la edil asegura que “no quiero que los locales tengan que cerrar. Y no tengo ningún problema en particular con el Santo Remedio. Su dueño lo sabe, yo se lo manifesté”.
El concejal Valenzuela agrega que “si revisas el número de patentes de alcoholes presentadas, vas a ver que son más las que se aprueban que las que se rechazan. Eso muestra qué es lo que está ocurriendo”.
En un tono más crítico, Mauricio Labbé acusó un “show mediático” por parte del dueño del Santo Remedio. “Que yo recuerdo no hemos tenido un conflicto con alguna no renovación de patente. Han habido solicitudes de petición de patente de alcohol a las cuales se han aprobado y otras se han rechazado, evidentemente, por distintos factores. Pero de la magnitud del show mediático que se ha generado con respecto a Santos Remedios, no“, asegura.
El incierto futuro del bar y los motivos detrás del rechazo de la patente de alcohol
Los concejales ponen énfasis que el bar Santo Remedio perdió sus permisos durante la administración anterior, y que esta solo lo ratificó. En esa línea, apuntan a que el icónico local nocturno estaba funcionando de forma ilegal.
“Ellos ya habían perdido la patente, y en la reposición volvieron a perder. Ahora, no estoy 100% seguro si es que ellos pueden volver a presentar una apelación a la reposición. El problema que yo veo es que en ellos no hay autocrítica respecto a por qué perdieron la patente de alcohol, y fue básicamente por el mal comportamiento”, señala Rodrigo Valenzuela.
Y agrega que “la patente de alcohol de ellos era una patente de alcohol tipo restaurante, quiere decir música ambiental, vender comida y música ambiental con alcohol. Pero ellos hacían fiestas, las promocionaban incluso por redes sociales. Fiestas con música a alto volumen, y eso generó mucho reclamo de los vecinos”.
Pino acota que “la mayoría de los casos que nos han reportado, los problemas de los vecinos son con la salida de los locales. Y en particular con el Santo Remedio, ese es el mayor problema que nos han reportado los vecinos. Que es cómo se comportan sus clientes al salir y que siempre es a una hora fija”.
El concejal Labbé asegura que difícilmente el bar pueda postular a una patente de cabaret. En ese sentido, apunta a que lo máximo sería discutir hoy que vuelva a tener de restaurante, pero que la respeten. “Los locales que tienen patente de discoteca funcionan como discoteca. Los locales que tienen patente de restaurante funcionan como restaurante. Y todos los que no se han revocado otras patentes porque están funcionando dentro del marco de la ley“, concluye.
Fuente: The Clinic