Jim Morrison es una de las figuras más emblemáticas del rock, el cantante de The Doors no solo es recordado por su carisma y voz sino que tras su fallecimiento el 3 de julio de 1971, pasó a ser uno más del denominado “Club de los 27”. Su tumba en el cementerio parisino de Père Lachaise ha sido un sitio de peregrinación para los seguidores de la banda estadounidense, pero no ha estado exenta de polémicas.
Cuando se cumplieron 10 años de la muerte del “Rey Lagarto”, el artista croata Mladen Mikulin realizó un imponente busto de Morrison que fue colocado en su tumba, sin embargo la obra fue robada en 1988, y desde entonces nunca más se supo de su paradero, hasta ahora.
El paradero del busto de Jim fue un misterio durante 37 años, hasta esta semana, cuando investigadores de las brigadas financiera y anticorrupción de París dieron con él de casualidad en medio de un allanamiento.
En medio de una investigación por fraude, los uniformados se percataron de la obra que llevaba décadas desaparecida. La policía judicial publicó una imagen del busto recuperado, donde se aprecia cubierto de escritos, y sin nariz.
No se ha entregado mayor información respecto a las circunstancias en las que el busto de Jim Morrison terminó en dicho domicilio, ya que aún es materia de investigación.
Fuente: La Cuarta