Gaza entre la espada y la pared preocupa a la ONU.

Se estiman mas de 680 asesinados

Gaza entre la espada y la pared preocupa a la agencia de Naciones Unidas para refugiados palestinos.

La agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos, la UNRWA, informó este sábado que más de dos millones de habitantes de la Franja de Gaza se encuentran en una situación de “vida o muerte” por la falta de agua en el enclave, escenario desde hace una semana de un contraataque israelí en respuesta a la ofensiva del pasado sábado lanzada por Hamás.

El Ejército israelí había informado previamente a la población del norte de Gaza que tenía hasta las 16:00 hora local (13:00 GMT, 10:00 hora de Chile) para trasladarse al sur del enclave por una serie de carreteras específicas que, según aseguró, no serán bombardeadas hasta entonces.

Este mensaje llegó después de cumplirse el plazo de 24 horas que dio Israel en la madrugada de ayer a los 1,1 millones de habitantes del norte de la Franja, anticipando una intensificación de los ataques sobre el enclave palestino.

Hace una semana que Israel no permite la entrada de suministros humanitarios en Gaza, donde la planta de agua y sus redes de distribución han dejado de funcionar, por lo que la población se ve obligada a utilizar agua sucia de pozos, con el consiguiente riesgo de enfermedades transmitidas por el agua.

ONU expresa su preocupación por asedios en Israel y Gaza Gaza también sufre un apagón eléctrico desde el 11 de octubre, que también afecta al suministro de agua.

Por ello, el comisionado general de la UNRWA, Philippe Lazzarini, ha llamado al suministro inmediato de combustible en la Franja para que sus habitantes puedan beber. “Se ha convertido en una cuestión de vida o muerte. Es una necesidad”, ha declarado Lazzarini en un comunicado.

“Tenemos que transportar combustible a Gaza ahora. El combustible es la única forma de que la gente tenga agua potable. Si no, la gente empezará a morir de deshidratación grave, entre ellos niños pequeños, ancianos y mujeres. El agua es ahora el último salvavidas que queda. Hago un llamamiento para que se levante ya el bloqueo de la ayuda humanitaria”, ha reclamado Lazzarini.