Un debate comenzó esta semana con respecto a la Ley de Inclusión Escolar, luego que se conociera de la agresión de un alumno TEA a una profesora de Trehuaco. La docente fue agredida con una escoba y se mantiene internada en estado grave debido a que sufrió una fractura de su cráneo.
Con respecto al debate, la presidenta del Consejo Nacional de Educación, Luz María Budge, afirmó a The Clinic que “siempre es bueno ir revisando las políticas públicas y sus implementaciones. Cambian los contextos y cambian las necesidades”.
Con respecto a la Ley de Inclusión Escolar, explica que ésta “se promulgó el 2015, en esa fecha el diagnóstico TEA era muy escaso y probablemente los cupos PIE asignados a cada colegio no consideraban a la desregulación como una variable“.
“El Programa de Integración Escolar y la ley TEA tendrían que volver a revisarse, a la luz de los datos y del enorme incremento de este diagnóstico. Ciertamente hay que analizar y hacer un seguimiento con muchas hipótesis, considerar mecanismos de diagnóstico, exhaustividad del diagnóstico, tipos de tratamiento, temporalidad de estos, etc”, afirma.
“Dentro de la información que se entrega en el SAE respecto de las características de los establecimientos no se explicita las capacidades que el colegio tiene para atender necesidades educativas especiales transitorias o permanentes. Esto podría remediarse sin necesidad de incurrir en modificaciones legales Los colegios podrían sincerar su capacidad y los apoderados podrían ajustar sus expectativas”, plantea Budge.
¿El TEA en las mallas curriculares?
Consultada sobre si es necesario mejorar la malla inicial en la docencia. Budge indica que si bien no conoce en detalle las mallas curriculares de las carreras de Educación Diferencial, “tiendo a pensar que el problema está más bien en los recursos humanos y económicos y las expectativas de los padres. Un profesor, por buena que haya sido su formación , difícilmente podrá atender casos especiales de desregulación si tiene a 39 alumnos más en la sala de clases, se requiere más que conocimiento específico”.
“Los profesores de educación general básica actualmente en ejercicio puede que conozcan las particularidades de los requerimientos TEA, pero no necesariamente pueden gestionarlo en la sala de clases”, agrega.
“Mineduc no educa a los apoderados”
La periodista y directora ejecutiva de la “Fundación Una escuela para todos“, Claudia Aldana, explica que “hace diez años, uno de cada diez niños con discapacidad egresaba de Cuarto Medio. Ahora, gracias al Sistema de Admisión Escolar (SAE), sí están entrando. Por primera vez, la sociedad se está encontrando con nuestros hijos en la sala de los colegios públicos. Por eso estamos en este proceso de adaptación y de aprendizaje que es tan complicado”.
“Mineduc no educa a los apoderados”, acusa. Además, señala que “es súper importante, cuando tu tienes un hijo con mayor necesidad de apoyo, tienes que transparentarle al colegio todos sus tratamientos médicos”.
Aldana recuerda que la Ley TEA “exigía una capacitación de los profesores y los cuerpos auxiliares de los colegios. Como fundación recorrimos todo Chile capacitando a los jardines infantiles de Integra, porque esto es caso a caso, pero tienes que enseñar ciertas cosas (…) Yo no he sabido de más colegios que se estén capacitando. Los profesores pueden tener la mejor de las voluntades, pero en las mallas curriculares de pedagogía aún no hay ramos de neurodivergencia y de inclusión“.
“Me pongo en el lugar del profe. Llegas al colegio, tienes todas las ganas de hacerlo bien pero no tienes herramientas. No sabes qué pedirle o que no pedirle a un estudiante autista. Los ves como a todos como estos ‘cachitos’ en la sala. Por supuesto que es súper complicado”, señala.
Aldana recalca que “la inclusión no es hacer una ley, la inclusión es educar a una sociedad a entender la diversidad (…) ¿por qué se asocia con que tenemos que encerrarnos en un leprosario? En redes sociales todos están como ‘oye, si tu hijo es raro, que se vaya’. Detrás de esa cuenta hay una persona y detrás de esa persona hay una familia. Entonces, hay un niño que va al colegio y que escucha que los TEA que son raros y como tiene un compañero TEA raro le hacen bullying”.
Fuente: The Clinic