En total, las personas ocupadas llegaron a 9.321.380, lo que representa 286.266 puestos de trabajo más que en el mismo periodo del año pasado.
La tasa de desocupación en Chile se ubicó en 8,3% en el trimestre abril-junio de 2024, de acuerdo con la Información entregada por la Encuesta Nacional de Empleo, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Con esto, registra una caída de 0,2 puntos porcentuales (pp.) en 12 meses. En la Región Metropolitana, en tanto, la tasa de desocupación del trimestre abril-junio de 2024, alcanzó un 8,2%, con un descenso de 0,8 pp. en doce meses.
En las mujeres, la tasa de desocupación se situó en 9,0%, aumentando 0,1 pp. en doce meses. En tanto, en los hombres,fue 7,9%, con una disminución de 0,3 pp. en el mismo periodo. En cuanto a las personas ocupadas, el INE destacó un aumento de 3,2% en doce meses. En total, estas llegaron a 9.321.380 en el país, lo que representa 286.266 puestos de trabajo más que en el mismo periodo del año pasado. Los sectores que contribuyeron al aumento de la población ocupada fueron comercio (3,7%), administración pública (10,4%) y enseñanza (4,3%); mientras que por categoría ocupacional, el alza se observó en personas asalariadas formales (3,6%) y trabajadoras por cuenta propia (3,3%). Informalidad vuelve a subir Por otra parte, la tasa de ocupación informal volvió a subir y se ubicó en 28,2%, con un alza de 1,0 pp. en un año. Así, las personas ocupadas informales aumentaron 7,2%, incididas tanto por las mujeres (8,1%) como por los hombres (6,4%). En esa línea, el número de trabajadores informales creció en 176.197 en en un año. Con esto hay un total de 2.631.514 personas informales en Chile. Los sectores económico con mayor informalidad son el comercio (11%) y transporte (14,4%), mientras que por categoría ocupacional incidió trabajadores por cuenta propia (10,1%). Horas de trabajo En relación al volumen de trabajo, medido a través del número total de horas efectivas trabajadas por las personas ocupadas, ascendió 1,1%. En tanto, el promedio de horas trabajadas decreció 2,1%, llegando a 37,3 horas. Según sexo, el promedio de horas para los hombres fue 39,4 y para las mujeres, 34,4 horas. La tasa combinada de desocupación y fuerza de trabajo potencial alcanzó 15,7%, con una reducción de 0,6 pp. en el período. En los hombres se situó en 13,7% y en las mujeres, en 18,3%. La brecha de género fue 4,6 pp.
Fuente: Emol.com